23.1.08

Un blindaje endeble

En una economía altamente globalizada es ilusorio pretender que un desplome en las bolsas de valores no va a afectarnos porque “estamos blindados”.

Hizo muy bien por ello el presidente Felipe Calderón en admitir ayer que este será un año complejo y de grandes desafíos, durante el cual tendremos que navegar a contracorriente, y en anunciar que se pondrán en marcha otros motores de la economía, como la inversión en infraestructura, la vivienda, el campo y el turismo.

Es decir, más allá de las frases efectistas con fines mediáticos, es necesario recurrir a medidas prácticas para reducir los daños. Los blindajes del nivel II, mínimos, son como los de aquellos chalecos antibalas de la policía capitalina que parecían rellenos de algodón, no de kevlar. Necesitaríamos blindajes del nivel VI, resistentes a armas de alto poder.

La verdad es que no podríamos resistir una desaceleración, que limitaría nuestro crecimiento económico de 2.7% a 2%.

No hay comentarios.: