SAN FRANCISCO DEL RINCÓN.— A menos de 500 metros de la casa habitada por Vicente Fox y Marta Sahagún resplandece un mudo complejo de invernaderos hidropónicos dotados con la más alta tecnología a nivel mundial.
Los toldos blancos tienen ventiladores en el techo, pero su ruido es imperceptible; abarcan cinco hectáreas y en su interior hay un oasis donde cada semana nacen 230 mil cabezas de lechuga libres de herbicidas y fungicidas y con un consumo de agua ocho veces menor al de los sembradíos aledaños a campo abierto.
Es uno más de los milagros ocurridos recientemente en el antiguo rancho San Cristóbal; pero éste sucede en las instalaciones de Next Vegetales, una de las tres plantas agroindustriales abiertas por los hermanos del ex presidente de México en los dos últimos años del anterior sexenio.
De la mano de la Organización Altex, filial del Grupo Bimbo, el renacimiento empresarial de los Fox Quesada implica también a las agroindustrias del ex secretario de Agricultura Javier Usabiaga Arroyo, quien siempre fue considerado públicamente por el ex mandatario como el mejor secretario de su gabinete...
Casi al borde de la carretera León-Cuerámaro, a la altura del kilómetro 12.5, está la planta de Xtra Congelados, justo en los terrenos donde antes estuvo ubicado Congelados Don José, la compañía que el ex mandatario de México fundó junto con sus hermanos en 1985, y que quebró.
Mientras se mantuvo bajo la administración familiar, esa empresa sólo produjo pérdidas. Aún está bajo el mando de Cristóbal, el mayor de los hermanos Fox, aunque ahora rinde cuentas a un consorcio multinacional, que se encarga de comercializar las 45 mil toneladas anuales de brócoli congelado que produce.Para mediados de 1999, cuando estaba por iniciar la campaña presidencial, Congelados Don José, El Cerrito y Botas Fox tenían una situación comprometida: tenía que cubrir un adeudo de 20 millones de dólares.
Con poca suerte, habían pagado las consecuencias del “error de diciembre” de 1994. Para conseguir clientes, Cristóbal y Juan Pablo viajaron a Atlanta, París y hasta a Tokio. Los consiguieron, pero necesitaban invertir.
Tuvieron que hipotecar la planta congeladora, pero Banorte, Bancomer, Banamex y Serfin, a través de Bancomext, les concedieron el préstamo. Cuando los plazos se vencieron, nunca pudieron pagar los débitos y se fueron al Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa).
Giro de la fortuna
Pero la llegada de Vicente Fox a Los Pinos salvó su historia. Por 4 millones de dólares, la familia Servitje había comprado esa cartera vencida y en lugar de deshacerse de los antiguos dueños, los integró como socios en Grupo Altex, una de las filiales de Grupo Bimbo más rentables.
En el último tramo del sexenio foxista fue cuando Altex se reafirmó como el grupo agroindustrial de mayor importancia en México, con las procesadoras instaladas en las propiedades de los Fox y los Usabiaga, que los han convertido en los principales exportadores mexicanos de brócoli.
-- No por nada el pasado fue el sexenio de Bimbo y los demás 'empresarios' que han impuesto la agenda panista y a sus 'candidatos'. Esta es una verdadera kakistocracia (democracia de los peores). Por cierto, el siempre pío Servitje (con cara de maldito, si lo han visto alguna vez), no contento con el radicalismo 'ultra' de derecha, pretende crear un partido de "derecha de la derecha" si se puede ser más radical todavía. Quiere revivir a los sinarquistas. No sabe que México ya no vive en el siglo XVIII, sino entrado el siglo XXI.
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